Inicio > Uncategorized > DE RIBERALTA AL ACRE (parte V) – 28.11.2023

DE RIBERALTA AL ACRE (parte V) – 28.11.2023

Martes, 28 de Noviembre de 2023

Septiembre 3.
Desde horas cuatro de la mañana, los expedicionarios estamos en pie y emprendemos la marcha al salir el sol. A medio día, hacemos un corto descanso para almorzar, en una barraca nueva llamada San José, donde el dueño que es un brasileño está rozando el bosque para su cultivo. De aquí en adelante, empieza ya a oírse el habla portuguesa.
A horas 5 p.m. llegamos al Rapirran arroyo de bastante agua y abundante en las temibles palometas. Hay un puente no muy seguro.
Septiembre 4
Muy temprano levantamos el campo, porque tenemos de hacer una jornada fuerte para llegar a Gabión, donde estuvimos a horas 12 del día, caminando con un sol abrasador.
Gabión es propiedad de los Sres. Souza ctc. Castro y Liberaliño, excelentes caballeros y muy decididos por los bolivianos, a quienes han colmado siempre de agasajos.


Uno de los socios, Oliverio Liberaliño, a causa de su adhesión a Bolivia, fue tenazmente perseguido cuando la revolución de Braga en 1900; su cabeza fue puesta a precio; y tuvo que andar prófugo por los bosques, largo tiempo. Les había negado a los revolucionarios sus armas, víveres y gente, para ofrecerlos a las autoridades bolivianas.*
Adviértense ya en toda su plenitud los usos y costumbres brasileñas.
Desde luego, las distancias no se computan como entre nosotros, por leguas sino por horas.
El calor sofocante de este día, no nos permite avanzar más y se resuelve hacer esta noche aquí el campamento.
Septiembre 5
A horas 7 a.m. nos ponemos en marcha; y con una buena caminata, llegamos a horas 10 y 30 a.m. al Iquirí, donde hay una barraca de un brasileño, Cabral.
El Iquirí es ( 1 ) en esta parte, un arroyo, que en su curso va recogiendo las aguas de un centenar de arroyitos que le llegan de todos lados; más abajo, todavía en territorio boliviano, ya es navegable en canoas; y en territorio brasileño se incorpora al Ituxi, que desemboca en el Purús.
Toda la región del Iquirí, desde sus cabeceras que corren de O, á N. E., es prodigiosamente rica en siringales; y las márgenes están pobladas de barracas.
De Gabión al Iquirí, se va en solo tres horas.
Después de un corto descanso, seguimos viaje a horas 2 p.m.; y hacemos alto en el Tercer Arroyo, sobre el camino, cortando las malezas, desgajando ramas y barriendo el suelo.
Los soldados se entusiasman tanto con esta operación, que solo se oye el estruendo que hacen en el bosque, como si pretendieran derribarlo todo.
Contribuye también a esta buena disposición de ánimos, la circunstancia de que mañana podemos llegar a Capatará, es decir al Acre.
Por la noche se hace un riguroso servicio de campaña y escuchamos a lo lejos el alertéo de nuestros centinelas avanzados, perdidos a la distancia en el camino y en el bosque al contorno del campamento.
Desde Palestina, hemos escuchado los rumores de que podemos encontrarnos con otra revolución; rumores crecientes que se acentúan a medida que avanzamos.
Septiembre 6.
Formada la tropa, desfila a horas 6 a.m. Se nota mayor animación en los soldados, sin duda por la aproximación al término del viaje y caminan más fuerte. A horas 7 y 25 a.m. llegamos a la barraquita Tres de Julio, que encontramos vacía y al parecer recién abandonada, pues todos los útiles y cacharos de cocina están a la vista. Poco después nos informan que los dueños habían huido, llevándose sus gallinas, perros, etc., temerosos indudablemente de algunos estropicios manu militari; temor qué, en todo caso sería infundado, porque nuestros soldados tienen dadas muchas pruebas de rigurosa disciplina y moralidad, al punto de no haberse oído una sola queja contra ellos.
Como se le había anunciado de Gabion al Corregidor de Capatará, D. Domingo Braga que para este día y hora estaríamos en Tres de Julio, pocos instantes después de nuestra llegada, aparecen varias mulas cargadas trayendo víveres para la expedición.
De esta barraca a Capatará solo dista tres horas de viaje y podríamos llegar antes de medio día. Pero no conviene seguir esa vía, porque en Capatará no hay canoas en que bajar hasta Vuelta de Empresa y se necesitarían muchas para movilizar a un tiempo la tropa, sin fraccionarla.
La Lancha nacional Iris tampoco puede arribar hasta Capatará, porque se interpone la Cachuela de Riosinho, que es infranqueable en la estación seca, en que nos encontramos.
La cachuela de Riosinho, está en el río Acre, a quince minutos más arriba de la boca del Riosinho y no es propiamente una cachuela como las del Mamoré o la del Beni, sino una serie de correntezas o bifurcaciones producidas por algunas protuberancias del lecho del rio formadas de petrificaciones de cascajo y que aparecen a flor de agua en tiempo seco. Desaparecen en las crecientes del río, cuando las aguas alcanzan hasta las alturas de las barrancas; pero aún así, los pilotos de los Vapores pasan por ahí con muchas precauciones.
En vista pues de estos obstáculos, se decide continuar la marcha por tierra a Vuelta de Empresa, siguiendo por una senda, bastante tortuosa. A poco de haber andado, cae un copioso aguacero que en breves instantes nos deja empapados y chorreando agua.
A horas 4 p. m. llegamos a Joaquín Pedro, barraca de un freguéz llamado así.
En este punto acampamos y se hace la distribución por raciones de los víveres traídos de Capatará.
De Tres de Julio a Joaquín Pedro dista cuatro horas de viaje. Nosotros hemos tardado seis horas. á consecuencia de la lluvia.
(Continuara…)
—————————
(*) En la revolución actual, Liberaliño fue obligado por Plácido de Castro a contribuir con su persona y toda clase de recursos, bajo de pena de ser fusilado en el acto y confiscados sus bienes; como ha hecho igualmente con muchos otros que eran adictos conocidamente a Bolivia. Liberaliño ha tenido que tomar parte en esta revolución y convertirse en un feroz enemigo nuestro.
N. del A.
1 Se reconoce como cabecera principal del Iquiri, el Sabimanu, que baja casi en la misma dirección del Caramanu y no muy lejos del Acre. Sabimanu: o río de los monos amarillos, por existir en esa parte, numerosos grupos de esa familia de cuadrumanos pequeños.
Tomado del libro: “La revolución del Acre” de José Manuel Aponte R.

  1. Comentar yet.
  1. Sin trackbacks aún.