Los trabajadores de educación urbana  instalaron una  vigilia  de  apoyo  a los  ejecutivos nacionales  que  se tapiaron en La Paz y advirtieron con radicalizar  sus medidas en la región desde  el  lunes próximo, si es que  el  Gobierno no instala el diálogo para proceder  a la nivelación  salarial para todo el magisterio.

Con el lema “Nivelación o Muerte” los educadores   se  apostaron  ayer por la tarde en una esquina de la unidad educativa “Juana Azurduy de Padilla”,  en el  centro de  Riberalta,  sin suspender sus labores, efectuando una asistencia gradual   a  la  vigilia  sin afectar  las labores  de aula, precisó la  ejecutiva  Claribel Sandoval. Los maestros del  turno  de la mañana asistirán  a la  vigilia por la tarde, mientras que los educadores que trabajen por la tarde lo harán por la mañana del siguiente día, precisó  la dirigente.

Los maestros también señalaron que tres de  sus  principales  dirigentes locales se tapiaran el lunes  en  Riberalta, simultáneamente    al  endurecimiento de las medidas  de protesta que se efectuarán en todo el país.

Entretanto,  los educadores rurales  se mantienen  en  el marco de normalidad y expresaron que en su momento adoptarán medidas  de presión  dentro del marco de las negociaciones que efectúa la  Central  Obrera Boliviana con  el  Gobierno.

Duras criticas lanzaron los dirigentes vecinales  contra  el Sistema  General de Identificación Personal (SEGIP)  por la tardanza  en la entrega  de documentos  y  la excesiva burocracia   en los trámites,  lo que  perjudica diariamente  a   gran parte de la población.

El  ejecutivo vecinal Bruno Moreno  manifestó  que   a  partir de este fin de semana  se otorgará  un plazo de  48 horas para que  el SEGIP   solucione sus problemas   en Riberalta y agilice  el  servicio, caso contrario  se convocará a  una marcha  de protesta que llegará  hasta  sus instalaciones  y se adoptarán medidas de consenso entre todos los dirigentes barriales.

Moreno calificó  como  un atropello el tener diariamente  a  decenas de personas, especialmente de la tercera edad,  formando  filas  en las afueras del  SEGIP sin tener resultados. “Los hacen venir en vano, los convocan y no les entregan sus documentos, durante más de dos semanas peregrinan   y no hay resultados “, precisó  el directivo