La Asamblea Legislativa Departamental de Pando declaró  estado de emergencia económica, provocado por una disminución histórica de la producción de castaña que afecta la economía de al menos 15 mil familias productoras de la región.

El sector exportador reportó una pérdida aproximada de 180 millones de dólares. Asimismo, cerca de 22 mil personas quedarán sin empleo por tres meses, debido al cierre temporal de las fábricas del rubro.

El presidente de la Asamblea, Osmar Aradíez, informó a Erbol que las economías familiares  atraviesan una situación complicada por la falta de recursos económicos que reportaron varios municipios en informes que enviaron a la Gobernación. La Asamblea Departamental atendió las demandas municipales el pasado lunes.

En contacto con este medio, el ejecutivo de la de la Federación Sindical Única de Trabajadores Romeros y Castañeros de Bolivia, Edwin Roca, informó que la crisis del sector surge a raíz de  la sequía registrada en 2016, la deforestación regional y la intervención de maquinaria pesada en la selva.

“Estamos en un desastre económico en Riberalta en estos momentos (…) la gente está desesperada, quieren hacer huelga de hambre, quieren hacer marchas de protesta en contra del Gobierno (…) la situación está muy difícil en la Amazonia Bolivia”, afirmó Roca.

Crisis en la cadena productiva

El ejecutivo de la Federación Única de Campesinos de Pando, Ciro Cordero, advirtió que la baja recolección de castaña en el departamento afectó de forma integral a todo el sector productivo, que también involucra a campesinos, fabriles, transportistas y exportadores.

Indicó que el sector productivo “se encuentra alarmado”, ya que se reportaron pérdidas que alcanzan el 75 por ciento de la producción, además de cierres temporales de los centros productivos locales por 90 días.

“Del 100 por ciento de la producción, sólo ha podido rendir el 25 por ciento. Alrededor de 21 empresas van cerrando. Solamente van a funcionar ocho en Riberalta y en Cobija estarían funcionado dos por Cobija”, precisó Cordero en contacto telefónico con Los Tiempos.

Advirtió que alrededor de 22 mil personas quedarían sin empleo temporalmente de las 25 mil que se dedican al rubro.

ESTRATEGIA DE RECUPERACIÓN DEL SECTOR QUEDA PENDIENTE

A principios de abril, la gerente comercial del Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas (Sedem), Ana Guzmán, informó que la Empresa Boliviana de Almendras (EBA) y la Cámara de Exportadores del Norte (Cadexnor) elaborarían una estrategia conjunta para contrarrestar el déficit en la producción de la castaña provocado por la sequía.

“No solamente una empresa (EBA) tiene que tomar medidas sobre esta situación, sino es todo el sector que en este momento está allá movilizado (…), se está trabajando en eso conjuntamente con la Cadexnor para informar a la población en general y sobre todo para tomar medidas correctivas ya que estamos a tiempo”, explicó en ese entonces a ABI.

El ministro de Desarrollo Rural y Tierras, César Cocarico, informó el tres de abril que sólo se cosechó el 40 por ciento de castaña, aunque los dirigentes consultados por Los Tiempos reportan un 25 por ciento.

Según fuentes institucionales, Bolivia es el primer exportador de almendra de Sudamérica, con 75 por ciento, pues cada año vende 22.000 toneladas; Brasil, 4.500, y Perú 3.475 toneladas del fruto.

Fuente: http://www.lostiempos.com/actualidad/economia/20170426/pando-emergencia-baja-produccion-castana